¿Sabías que una exposición excesiva al flúor puede producir una afección llamada fluorosis dental? Seguramente has escuchado muchas veces lo importante que es el flúor en la lucha contra las caries. E, incluso, que te hayan hablado de la necesidad de usar pastas de dientes fluoradas para remineralizar el esmalte, haciéndolo más resistente frente a las lesiones cariosas. En base a esto, resulta chocante que el flúor pueda tener algún efecto negativo sobre la boca. Para ayudarte a salir de dudas, hemos elaborado un artículo acerca de su impacto en los dientes.
¿Qué es la fluorosis dental?
La fluorosis dental es una alteración del esmalte producida por una exposición excesiva al flúor durante el proceso de formación de los dientes. Esta etapa tiene lugar desde el primer trimestre de gestación hasta los seis años de vida, aproximadamente.
A pesar de que la fluorosis tenga su origen en la primera etapa de la vida, sus síntomas son visibles en los dientes definitivos, en lugar de en los dientes de leche. En concreto, las piezas dentales más sensibles a este problema son las muelas y los incisivos centrales.
El flúor, en las cantidades adecuadas, es un mineral beneficioso para la prevención de las caries, pero provoca efectos secundarios cuando se consume en exceso durante la infancia.
La exposición excesiva al flúor da lugar a una hipermineralización del esmalte y provoca que el esmalte no se forme de manera adecuada. Esto afecta a su calidad y deriva en manchas o estrías visibles en los dientes. Además, la baja calidad del esmalte provoca una mayor susceptibilidad a sufrir caries, desgastes, erosiones y sensibilidad dental.
Síntomas de la fluorosis dental
Los síntomas de la fluorosis dental pueden variar en función de la severidad del caso. Los principales signos que presentan los dientes afectados por la fluorosis son los siguientes:
- Cambios de color: uno de los signos más habituales de fluorosis es la existencia de zonas más blancas y opacas de lo normal.
- Pérdida de brillo en el esmalte, haciendo que los dientes se vean opacos.
- Pequeñas grietas y estrías: normalmente, estas grietas y estrías son de color blanco. Sin embargo, en los casos más severos de fluorosis pueden aparecer manchas marrones o pequeños hoyos.
- Textura áspera del esmalte.
Diagnóstico de la fluorosis dental
El diagnóstico de la fluorosis dental generalmente lo realiza un odontólogo a través de una exploración clínica de los dientes (examen visual). En casos más complejos, el dentista puede requerir radiografías y una revisión detallada del historial médico y de la exposición al flúor del paciente.
El diagnóstico temprano es crucial, especialmente para abordar los casos más severos y para evitar un empeoramiento de la condición, tanto a nivel estético como de salud (caries, desgastes…).
Los principales tratamientos para la fluorosis dental son el blanqueamiento, las carillas y las coronas.
Principales causas de fluorosis dental
En general, la principal causa de la fluorosis dental es la sobreexposición al flúor durante la etapa de formación del esmalte. Esto sucede cuando el feto o el niño están expuestos a unos niveles de flúor superiores a los recomendados para su edad.
Las razones por las que esto puede ocurrir son las siguientes:
Alta concentración de fluoruro en el agua
El consumo de agua con una concentración de flúor elevada puede causar fluorosis. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cantidad de fluoruro en el agua potable no debe ser superior a 1,5 mg/l.
Dicho esto, el consumo directo de agua no es lo único que puede causar fluorosis. En este punto, se debe tener en cuenta el riesgo que existe de desarrollar fluorosis debido al consumo de alimentos lavados o procesados con agua excesivamente fluorada.
En España, el consumo de agua potable es seguro. Por tanto, las dos situaciones mencionadas son improbables en nuestro país. Sin embargo, no ocurre lo mismo en determinadas regiones de África, India o China.
Uso de pastas de dientes o colutorios
El uso de dentífricos o enjuagues bucodentales con una cantidad de flúor superior a la recomendada es otra de las causas de fluorosis dental. Esto puede suceder cuando los bebés o los niños utilizan productos de higiene bucodental que no son adecuados para su edad.
La ingesta de flúor debe ir aumentando gradualmente con el paso de los años, y a medida que los niños desarrollan la habilidad de escupir el dentífrico o enjuague (en lugar de tragárselo). En general, los niños pueden empezar a usar las pastas de dientes para adultos a partir de los seis años. Si estos tiempos no se respetan, existe el riesgo de desarrollar fluorosis.
Consumo de suplementos con flúor
El consumo de suplementos con fluoruro en embarazadas o niños menores de seis años también puede provocar fluorosis dental. Para evitar un exceso de dosis, es imprescindible tomar todos los suplementos bajo estricto control médico.
Tratamiento de la fluorosis dental
El objetivo principal de cualquier tratamiento para la fluorosis dental es asegurar la salud de los dientes, así como restablecer la estética y armonía de la sonrisa. Generalmente, el tratamiento más adecuado depende de la gravedad del caso y del número de piezas dentales afectadas.
Blanqueamiento dental
El blanqueamiento dental es un tratamiento al que se puede recurrir en casos de fluorosis leve. Por ejemplo, cuando solo se aprecian unas ligeras manchas o decoloraciones en el esmalte.
Carillas dentales
Cuando el blanqueamiento no resulta suficiente, el odontólogo podrá recomendar la colocación de carillas dentales, las cuales pueden ser de composite o porcelana. Las carillas se colocan sobre la superficie de los dientes, ocultando las manchas y mejorando la apariencia general. En este tipo de tratamientos combinados (blanqueamiento y carillas), primero se llevará a cabo el blanqueamiento dental y, a continuación, se colocarán las carillas.
Coronas dentales
Por su parte, el tratamiento indicado para los casos más severos de fluorosis dental puede ser la colocación de coronas. Las coronas son unas prótesis dentales que cubren totalmente la estructura del diente. Por tanto, permiten tapar las manchas o los daños por completo. Asimismo, ayudan a proteger el diente de futuras lesiones, lo cual es necesario cuando el esmalte está gravemente afectado por la fluorosis.
Dado que existen distintos tratamientos para la fluorosis dental, el profesional deberá evaluar al paciente y determinar cuál es el más indicado, en función de la severidad y la extensión de la afección.
¿Cómo prevenir la fluorosis dental?
Los principales consejos para prevenir la fluorosis dental son los siguientes:
- Usar productos de higiene oral específicos para cada edad: los niños menores de seis años no podrán utilizar dentífricos ni colutorios para adultos. Por tanto, a la hora de comprar estos productos habrá que asegurarse de que están recomendados para la edad del niño.
- Adaptar la cantidad de pasta de dientes: no es recomendable guiarse por las imágenes de los anuncios de dentífricos en televisión, y menos en el caso de los niños. No es necesario ni aconsejable que la pasta rebose en el cepillo. Además, la cantidad de dentífrico también tiene que estar adaptada para cada edad. Por ejemplo, en los bebés dicha cantidad debe ser mínima, ya que no saben enjuagarse ni escupir. En el caso de los niños menores de seis años, la cantidad de pasta dental deberá ser similar al tamaño de un guisante.
- Consultar la rutina de higiene oral con el odontopediatra: en general, lo más recomendable es preguntar al dentista cuáles son los hábitos concretos de higiene bucodental que se deben seguir con cada niño (concentración de flúor, cantidad de dentífrico…).
- Supervisar el cepillado de los niños: los niños menores de seis años deben ser supervisados por un adulto durante el cepillado, con el objetivo de evitar que ingieran la pasta dental.
- Consumir agua mineral embotellada: los niños menores de seis años que viajan a regiones donde el agua potable tiene una concentración de flúor superior a la recomendada para su edad deberán usar agua mineral embotellada. Este consejo no afecta solo al agua que beben directamente, sino también a la que utilizan para enjuagarse o lavarse los dientes.
- Evitar la ingesta excesiva de suplementos con flúor: las embarazadas y los niños menores de seis años deberán ser especialmente cuidadosos a la hora de respetar las dosis y el tiempo de administración pautados por el médico.
Tomar estas precauciones puede ayudar a reducir significativamente el riesgo de fluorosis dental y asegurar que los dientes de los niños crezcan sanos y fuertes. En cualquier caso, si tienes alguna duda sobre cómo actuar ante la fluorosis dental, te recomendamos llamar a una de las clínicas dentales Vitaldent y solicitar tu primera visita gratuita. Nuestros profesionales evaluarán tu caso y te indicarán las pautas a seguir para iniciar el tratamiento para la fluorosis dental más adecuado para ti.