Filipa Nunes Filipa Nunes
5 min de lectura
Revisado por la Comisión Médica
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Los caninos -también llamados colmillos- son unos dientes que juegan un papel esencial en la boca, tanto a nivel funcional como estético. Por ello, resulta fundamental que erupcionen por completo y en el plazo previsto. Cuando esto no sucede, nos encontramos ante un caso de caninos incluidos. En el artículo de hoy te vamos a contar en qué consiste este problema y cómo se puede solucionar.

¿Qué es un canino incluido?

Un canino incluido es un diente que, a pesar de estar formado, no erupciona en el plazo previsto. Por tanto, permanece retenido dentro del hueso y la encía.

Normalmente, los caninos inferiores erupcionan entre los nueve y los 11 años, mientras que la erupción de los superiores se produce algo más tarde, entre los 11 y los 13 años.

Los caninos son unos de los dientes que se quedan retenidos con mayor frecuencia, por detrás de las muelas del juicio. Y, más concretamente, los caninos superiores son los más propensos a la inclusión.

Causas de los caninos incluidos

Los caninos incluidos pueden deberse a múltiples causas. Las más habituales son las siguientes:

  • Falta de espacio: cuando no hay suficiente espacio en la arcada para que el canino erupcione, este puede quedar retenido en el hueso.
  • Ausencia de incisivos laterales: la agenesia de los incisivos laterales también puede causar caninos incluidos. Esto se debe a que los incisivos laterales son unos dientes que sirven de guía para que el canino erupcione.
  • Retraso en la caída de los caninos de leche: el hecho de que un canino temporal no se caiga en el plazo adecuado puede interrumpir el proceso de erupción normal del colmillo permanente.
  • Pérdida prematura de los caninos de leche: cuando un canino se cae antes del plazo adecuado y no se coloca un mantenedor de espacio, el resto de dientes de la arcada pueden tratar de ocupar el espacio vacío. Como los colmillos son los últimos dientes en erupcionar, cabe la posibilidad de que ya no encuentren espacio para hacerlo.
  • Dientes supernumerarios: la presencia de dientes adicionales en la arcada puede obstruir el camino natural que tiene el canino para erupcionar, evitando que llegue hasta su posición correcta.
  • Odontomas: son los tumores odontogénicos más frecuentes. Aunque se trate de tumores benignos, pueden alcanzar hasta los cuatro centímetros de diámetro. Esto, al igual que en el caso anterior, dificulta la erupción del colmillo.
  • Genética: al igual que sucede con otros problemas dentales, la predisposición genética es una de las principales causas de los caninos incluidos. Si alguno de los progenitores sufrió caninos incluidos en el pasado, existe un mayor riesgo de que su hijo padezca el mismo problema.
  • Anquilosis dental: esta es una alteración que provoca la unión entre el diente y el hueso que lo rodea. Es más frecuente en los dientes de leche y, entre otras cosas, impide que estas piezas dentales se caigan a tiempo y que los dientes definitivos erupcionen correctamente.

Cuando hablamos de caninos incluidos, nos referimos a que el diente no ha erupcionado completamente y se ha quedado retenido en la encía.

Diagnóstico de los caninos incluidos

Para diagnosticar los caninos incluidos resulta necesario realizar una exploración clínica y radiológica al paciente.

En la exploración clínica, el signo más visible de que el colmillo presenta un problema de erupción es su ausencia en la boca, una vez transcurrido el plazo en el que debe salir. Esto es, entre los nueve y los 11 años para los inferiores y entre los 11 y los 13 años para los superiores.

Adicionalmente, el odontólogo puede identificar otras señales durante la exploración oral, como la persistencia del canino de leche en la boca más allá de la edad recomendada. Por otro lado, el colmillo incluido puede sentirse a la palpación. Y es que, a veces, aunque el canino esté retenido, puede palparse ligeramente por debajo de la encía.

En lo que respecta a la exploración radiológica, será necesario realizar una radiografía panorámica y un TAC dental. De esa manera, el dentista podrá observar cuál es la situación del colmillo en la boca (posición, altura, inclinación…) así como su relación con los dientes vecinos. Con toda esta información, podrá planificar el tratamiento más adecuado para los caninos incluidos.

Tratamiento de los caninos incluidos

Por lo general, resulta necesario tratar los caninos incluidos debido a las diversas complicaciones que pueden causar. Por ejemplo, la reabsorción de la raíz de los dientes vecinos, quistes o problemas de oclusión.

Dicho esto, el tratamiento más adecuado para un canino incluido dependerá, fundamentalmente, de la posición del diente y la edad del paciente. Por lo general, el procedimiento requiere el trabajo conjunto de un ortodoncista y un cirujano oral, ya que se basa en un tratamiento de ortodoncia y en una fenestración dental.

En primer lugar, se realiza el tratamiento de ortodoncia para abrir un espacio en la encía, que permita alojar al canino. En segundo lugar, se realiza una fenestración dental, que es una cirugía en la que se abre una pequeña ventana en la encía. En esta intervención, el cirujano retira el hueso y los tejidos blandos que obstaculizan la salida del colmillo, y expone la corona del diente.

Unos días después de la intervención, el ortodoncista coloca un botón en el canino que ha sido descubierto. A través de dicho botón, se podrá continuar el tratamiento de ortodoncia, ya que el botón sirve para aplicar las fuerzas de tracción necesarias para que el colmillo erupcione completamente.

Dicho esto, el tratamiento descrito puede variar en función del caso de cada paciente. Por ejemplo, en algunos casos, y en función de dónde esté situado el canino incluido, se podrá empezar a traccionar el colmillo antes de abrir completamente el espacio con el tratamiento de ortodoncia.

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¿Se pueden prevenir los caninos incluidos?

La completa prevención de los caninos incluidos es muy compleja, ya que hay distintos factores que escapan del control del paciente y de los dentistas. Sin embargo, existen algunas recomendaciones que pueden servir para reducir el riesgo o identificar de manera temprana un canino incluido:

  • Revisiones regulares: por lo general, la primera visita al ortodoncista debe producirse a los seis años de edad. Esto ayuda a comprobar si el proceso de erupción dental transcurre según lo previsto y a detectar problemas en una fase temprana, lo que también permite tomar medidas.
  • Radiografías periódicas: normalmente, en las visitas de revisión el odontólogo toma una serie de radiografías rutinarias al paciente. Esto permite una mejor observación de las estructuras bucodentales, lo que ayuda a detectar problemas que no se pueden advertir en una exploración oral.
  • Ortodoncia interceptiva: la ortodoncia interceptiva engloba todos aquellos tratamientos de ortodoncia enfocados a niños de entre seis y nueve años. Está basada en aparatos que permiten actuar sobre el crecimiento de los huesos de la cara. Por ejemplo, la ortodoncia interceptiva sirve para ampliar las arcadas y crear el espacio necesario para que el canino erupcione, reduciendo el riesgo de que se quede retenido en el hueso.
  • Mantenedores de espacio: son unos sencillos aparatos que se colocan cuando un niño pierde un diente de leche antes de tiempo (por caries, golpes…). Los mantenedores de espacio permiten que el hueco dejado por el diente permanezca abierto, en lugar de ser ocupado por los dientes vecinos, lo que dificultaría la salida del colmillo permanente.

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender qué son los caninos incluidos y con qué tratamientos se pueden corregir. De todas formas, si tienes alguna duda más sobre este problema, te invitamos a consultarla con nuestros dentistas en una primera visita gratuita.

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Filipa Nunes
Filipa Nunes
Filipa Nunes es coordinadora médica del área de Ortodoncia del Grupo Vitaldent. Se licenció en Medicina Dental por el Instituto Superior de Ciencias de la Salud en Lisboa (Portugal) y estudió un posgrado internacional en Odontología Integral en la Universidad de Nueva York (Estados Unidos). Además, cuenta con experiencia profesional como ortodoncista tanto en España como en Portugal.