Dr. Rafael Alvarado 
Si te vas a poner implantes es fundamental que conozcas el proceso de la osteointegración, que es clave en el éxito de este tratamiento dental. Durante esta fase, la pieza implantada se une y se fija al tejido óseo a medida que se produce la cicatrización. ¿Quieres saber cómo se desarrolla? Te lo detallamos paso a paso.
Puntos claves
- La osteointegración tiene lugar en cuatro fases: coagulación de la herida, inflamación, formación de nuevo tejido óseo y remodelación del hueso.
- Este proceso suele durar entre tres y seis meses, aunque depende de cada paciente.
- Se puede favorecer la unión del implante con el hueso con una dieta rica en calcio y vitamina D, una buena higiene oral.
¿Cuáles son las fases de la osteointegración?
La fusión del implante en el hueso se logra mediante la formación de nuevo tejido óseo alrededor de la pieza. De este modo, se va logrando la estabilidad necesaria para reemplazar los dientes faltantes y recuperar la funcionalidad de la boca.
La integración del implante en el hueso se divide en cuatro etapas: coagulación, inflamación, proliferación y remodelación.
1. Coagulación
Es la primera etapa después de la colocación del implante, lo que se hace mediante una perforación en el hueso. Después se procede a la inserción de la pieza, fabricada con un material biocompatible, que suele ser el titanio.
Esto activa el mecanismo natural de defensa ante la rotura de los vasos sanguíneos con la formación de un coágulo alrededor del dispositivo. En cuestión de horas, el organismo empieza a trabajar para reparar el área afectada.
2. Inflamación
La segunda fase empieza algunas horas después de la intervención y puede durar varios días. El organismo libera las células encargadas de la función inmunitaria, como los neutrófilos y los macrófagos. Estas se encargan de limpiar la zona lesionada de desechos, tejidos dañados y bacterias.
Aunque en esta etapa el paciente puede sentir molestias, resulta esencial la reacción inmunitaria para reducir el riesgo de una infección.
3. Proliferación
Este periodo de recuperación puede extenderse durante algunas semanas. Se caracteriza por la formación de nuevo hueso gracias a los osteoblastos. Estas células son las que empiezan a formar tejido óseo alrededor del implante para unirlo con el hueso maxilar o mandibular.
4. Remodelación del hueso
Por último, varias semanas después de la cirugía y durante algunos meses, el nuevo hueso formado va ganando densidad hasta integrarse por completo con el implante. De este modo se convierte en un soporte estable y sólido para colocar una prótesis dental.
Pide cita aquí ¿Cuánto suele tardar la osteointegración?
La duración del proceso de integración ósea varía según la persona, ya que depende de cómo el organismo responde a la cirugía y de muchos otros factores. Sin embargo, las estadísticas muestran una media de entre tres y seis meses, con algunos casos de hasta doce meses.
Durante este periodo, se coloca una prótesis dental provisional para facilitar la funcionalidad de la boca, siempre y cuando el odontólogo lo considere adecuado.
¿Cómo favorecer la osteointegración?
Los estudios demuestran que la adaptación de la pieza implantada en el tejido mandibular es fundamental para el éxito y la durabilidad del tratamiento. Por ello, conviene conocer qué factores influyen en el éxito de la osteointegración:
- Elección del implante adecuado: influyen características comola biocompatibilidad, la forma, el diseño o las características de la superficie que el implantólogo valorará.
- La técnica quirúrgica: la experiencia del profesional es clave. También es muy importante que cuente con el apoyo de tecnología digital, valorando la anatomía y densidad ósea del paciente antes de la cirugía.
- Cuidados posoperatorios: seguir las indicaciones del implantólogo, en especial durante las horas y días posteriores a la intervención.
- Una dieta equilibrada: una alimentación variada rica en nutrientes como el calcio o la vitamina D contribuye a tener una buena salud ósea en general y a mejorar la regeneración del tejido.
- Correcta limpieza bucodental: mantener una buena higiene oral a diario es la mejor manera de cuidar la salud de las encías y prevenir infecciones y enfermedades periodontales que pueden poner en riesgo el implante.
La osteointegración del implante puede tardar entre tres y seis meses, aunque en algunos casos se puede retrasar más.
¿Cómo prevenir el fallo de la osteointegración?
Hay algunas recomendaciones que te ayudarán a reducir el riesgo de fracaso de la osteointegración y de rechazo del implante.
En primer lugar, debes evitar todos aquellos hábitos que pueden perjudicar la salud de la boca. Por ejemplo, el tabaco y el alcohol, que dañan las encías, aumentan el sangrado y retrasan la cicatrización.
Del mismo modo, la costumbre de rechinar los dientes (bruxismo) o morder objetos duros pueden ejercer una sobrecarga perjudicial sobre el implante, en el caso de contar con una prótesis provisional. Consúltalo con tu dentista para ver qué opciones te pueden ayudar, como las férulas de descarga.
¿Padeces alguna patología como diabetes, enfermedades periodontales, trastornos de circulación, alergia a las penicilinas o de inmunidad? En este caso, también deberás informar a tu odontólogo, ya que podrían afectar a este proceso.
Por último, la experiencia del profesional, la calidad del implante y la precisión de la intervención son factores decisivos en el éxito del tratamiento. Por ello, elige una clínica dental reconocida y de confianza.
¿Te preocupa el proceso de osteointegración de un implante? Lo más importante es acudir a tus visitas de seguimiento y pedir cita ante cualquier síntoma. Visita tu clínica Vitaldent más cercana para prevenir a tiempo cualquier problema en el tratamiento.
