Filipa Nunes Filipa Nunes
3 min de lectura
Revisado por la Comisión Médica
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¿Has oído hablar de los brackets linguales? Estos aparatos te ayudarán a mejorar la apariencia y la funcionalidad de tu boca sin que se note que los llevas puestos. En este artículo, te contamos cuáles son sus ventajas e inconvenientes.

¿Qué es la ortodoncia lingual?

Para empezar, debes saber que todos los modelos de ortodoncia tienen el objetivo de rectificar la posición de los dientes y mejorar, así, tanto la estética de la sonrisa como la funcionalidad de la boca. Los aparatos se adaptan a las necesidades de cada paciente y se revisan de manera periódica.

Cuando hablamos de ortodoncia lingual nos referimos a los brackets que se colocan en la cara interna de las piezas dentales. Es decir, son aquellos que no se ven cuando la persona sonríe, ya que quedan por dentro, en contacto con la lengua.

Los brackets linguales son tan eficaces como cualquier otro procedimiento de ortodoncia. La duración del tratamiento dependerá de cada caso, aunque suele durar entre 18 y 24 meses.

Ventajas de la ortodoncia lingual

En primer lugar, estas son las principales ventajas de los brackets linguales en comparación con otros tipos de ortodoncia:

  • Son muy discretos y estéticos, dado que no se ven al sonreír.
  • Se fabrican a medida del paciente, a diferencia de los brackets metálicos o de zafiro.
  • Al ser personalizados, se mejora la eficacia del tratamiento y se acorta su duración.

Desventajas de la ortodoncia lingual

En segundo lugar, esta ortodoncia también presenta algunos inconvenientes que hay que valorar:

  • Como se realiza de manera personalizada, su precio es más elevado.
  • La higiene dental es más complicada, pues los aparatos no se pueden ver.
  • La persona tiene que acostumbrarse a tocar los brackets con la lengua, lo cual puede resultar incómodo al principio. Aun así, este problema se soluciona aplicando un poco de cera dental.
  • Asimismo, se pueden sentir cambios o molestias al masticar y al hablar.
  • Las revisiones odontológicas son más largas que con otros procedimientos.

¿Quién puede usar brackets linguales?

Para ayudarte a elegir el tratamiento de ortodoncia más adecuado, te recomendamos que acudas a tu odontólogo para expresarle tus dudas y evaluar tu caso. Algunos factores, como el tipo de problema a corregir, el estilo de vida o el precio pueden condicionarte a la hora de tomar una u otra decisión.

En general, los brackets linguales son perfectos para quienes buscan un tratamiento efectivo que no se ve con el fin de tener una dentadura armoniosa y saludable. En general, esta ortodoncia es idónea para corregir cualquier problema de mordida o maloclusión.

No obstante, el odontólogo podría sugerir, por ejemplo, una ortodoncia mixta a fin de reducir los costes. Esta consiste en combinar aparatos linguales en la arcada superior con otros normales en la inferior.

Las personas que más pueden beneficiarse de los brackets linguales son adolescentes o adultos que quieren una ortodoncia discreta, así como quienes están expuestos al público o van a ser protagonistas de algún evento, por ejemplo, una boda.

¿Es lo mismo la ortodoncia lingual que la ortodoncia invisible?

Aunque la ortodoncia lingual no se percibe a simple vista, cuando hablamos de ortodoncia invisible nos referimos a las férulas alineadoras transparentes y removibles que se colocan en ambas arcadas.

La ortodoncia invisible se elabora de forma personalizada por medio de una impresión digital en 3D. Está basada en unos alineadores que deben cambiarse cada semana, cada 10 días o cada dos semanas para ir corrigiendo de un modo progresivo el alineamiento de los dientes con pequeños movimientos.

Esta técnica es muy innovadora y más  popular que la ortodoncia lingual, ya que mucha gente no quiere que sus aparatos se vean al sonreír. Por ello, tanto la ortodoncia lingual como la invisible son los tratamientos más escogidos hoy en día.

¿Cómo es el tratamiento con ortodoncia lingual?

El tratamiento con ortodoncia lingual puede durar entre 18 meses  y dos años de media. Cada 4 u 8 semanas se hacen visitas de seguimiento para valorar el progreso del procedimiento y ajustar la tensión de los aparatos. Estas citas suelen tener una duración de unos 30 a 45 minutos.

A pesar de que, al principio, esta ortodoncia puede resultar más incómoda o complicada a la hora de mantener una higiene diaria, el paciente se acostumbra con el paso de los días. Además, a las pocas semanas de iniciar el tratamiento ya empiezan a ser visibles los resultados.

Consejos de higiene con brackets linguales

Durante el tratamiento con ortodoncia lingual, es fundamental seguir una higiene exhaustiva para evitar problemas como la acumulación de placa bacteriana, las inflamacion de encías (gingivitis) o las caries:

  • Cepillado después de cada comida durante al menos 2 minutos, diente por diente, insistiendo en la cara interna.
  • Uso de hilo dental una vez al día, antes de ir a dormir. Se puede emplear un hilo especial para ortodoncia o limpiadores interdentales.
  • Enjuague bucal para complementar la higiene oral.

Deberás tener cuidado con alimentos demasiado duros (puedes cortarlos en trozos pequeños) y con productos masticables como el chicle, el turrón, los frutos secos o los caramelos blandos.

¿Estás pensando en ponerte brackets linguales? ¿Quieres mejorar tu sonrisa sin que nadie lo note? Te recomendamos que visites Vitaldent, con clínicas en toda España y más de tres décadas de experiencia cuidando tu salud bucal.

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Filipa Nunes
Filipa Nunes
Filipa Nunes es coordinadora médica del área de Ortodoncia del Grupo Vitaldent. Se licenció en Medicina Dental por el Instituto Superior de Ciencias de la Salud en Lisboa (Portugal) y estudió un posgrado internacional en Odontología Integral en la Universidad de Nueva York (Estados Unidos). Además, cuenta con experiencia profesional como ortodoncista tanto en España como en Portugal.