María Latorre 
Las bolsas periodontales son un signo inequívoco de que una persona padece una enfermedad periodontal en estado avanzado. Por tanto, indican la necesidad de actuar cuanto antes e iniciar un tratamiento que frene los daños causados por dicha patología.
En este artículo te explicaremos qué son las bolsas periodontales, cómo se forman y cuál es su tratamiento. Pero, además, te diremos qué puedes hacer para prevenirlas.
¿Qué son las bolsas periodontales?
Las bolsas periodontales son surcos o depósitos que se forman en las encías, alrededor de uno o varios dientes. Son propias de personas que padecen una periodontitis en estado avanzado.
Las bolsas periodontales surgen por la proliferación de bacterias en la boca, como consecuencia de la falta de cepillado dental. Esta falta de cepillado es lo que hace que aparezcan la placa bacteriana y el sarro alrededor de los dientes.
En el caso de no eliminarlas, las bacterias llegan a provocar graves daños en la boca, como la destrucción del hueso que sostiene los dientes. Esto, en última instancia, provoca la caída de las piezas dentales. Por ello, resulta fundamental actuar contra las bolsas periodontales cuanto antes.
¿Cómo se forma una bolsa periodontal?
Las bolsas periodontales se forman debido a la proliferación de bacterias en la boca. Estas tienden a acumularse y a crear unos surcos o depósitos debajo de las encías, en los que se almacenan.
Cuanto más avanzada o agresiva sea la periodontitis, más profundas serán las bolsas periodontales, ya que albergarán a un número cada vez mayor de bacterias.
Tipos de bolsas periodontales
Existen dos tipos de bolsas periodontales: relativas y absolutas.
- Bolsa periodontal relativa o pseudobolsa: es el tipo de bolsa periodontal menos grave y profunda. Es visible, ya que se percibe un aumento del volumen de la encía. Sin embargo, no llega a dañar el hueso.
- Bolsa periodontal absoluta o verdadera: es el tipo de bolsa periodontal más grave. Es muy profunda y contiene una gran cantidad de bacterias, por lo que sí han alcanzado el hueso.
La principal manera de prevenir las complicaciones que ocasionan las bolsas periodontales es mediante una buena higiene oral.
Tratamiento de las bolsas periodontales
El tratamiento más habitual contra las bolsas periodontales es el raspado y alisado radicular, también conocido como curetaje dental.
Este procedimiento es realizado con unos instrumentos denominados curetas. Con ellos, en primer lugar se raspan las bolsas periodontales para retirar la placa bacteriana y el sarro acumulados debajo de las encías.
En segundo lugar, el dentista alisa la raíz del diente, con el objetivo de eliminar los pequeños recovecos que pueden dar lugar a la acumulación de bacterias.
Para curar las bolsas periodontales por completo, es fundamental complementar todo este procedimiento con un análisis de la placa bacteriana del paciente y el uso de antibióticos.
El análisis de la placa bacteriana sirve para detectar qué tipo de bacterias están presentes en la boca, en qué cantidad y cómo de virulentas son. Con esa información, el dentista pautará el tratamiento antibiótico más adecuado para erradicarlas.
En la inmensa mayoría de las ocasiones, el tratamiento descrito es suficiente para eliminar las bolsas periodontales. Sin embargo, hay ocasiones en las que los depósitos de bacterias son tan profundos que las curetas no alcanzan a eliminar toda la placa bacteriana y el sarro.
En estos casos, será necesario recurrir a una cirugía periodontal.
Prevención de las bolsas periodontales
La prevención de las bolsas periodontales pasa por prevenir la periodontitis, ya que dichos depósitos son un síntoma de la enfermedad.
Dicho esto, la principal manera de prevenir las bolsas periodontales es mediante una buena higiene oral, que evite el desarrollo de placa bacteriana y sarro:
- Cepillado dental: cepíllate los dientes después de cada comida.
- Enjuague e hilo dental: complementa tu rutina de cepillado con el uso de un enjuague bucal con flúor e hilo dental. Hay una gran cantidad de personas que desconoce la importancia del hilo dental y que no lo ha usado nunca. Sin embargo, es fundamental para retirar los restos de comida que se quedan entre los dientes, lo que da lugar a placa bacteriana y sarro.
- Revisiones: acude al dentista entre una y dos veces al año para que realice una revisión de tu boca y pueda detectar indicios de cualquier enfermedad periodontal en una fase temprana.
- Limpiezas bucodentales profesionales: en esa misma revisión, el odontólogo te indicará la frecuencia con la que deben hacerte una higiene profesional. Estas limpiezas sirven para eliminar los restos de comida y la placa bacteriana a los que el cepillo dental no llega.
La periodontitis es una enfermedad crónica y muy agresiva, que tiende a reaparecer en cuanto el paciente descuida mínimamente su higiene. Por tanto, si tienes bolsas periodontales es fundamental que sigas todos los consejos mencionados y que no te saltes ninguna revisión con el dentista.
En caso contrario, tu enfermedad se agravará, las bolsas periodontales serán cada vez más difíciles de eliminar y sufrirás la caída de más dientes. Para que esto no te pase, te invitamos a acudir a una revisión gratuita en una de nuestras clínicas dentales. Los odontólogos harán una revisión de tu boca y te dirán si puedes quedarte tranquilo o necesitas una limpieza profesional.
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