Gustavo Camañas 
Salivar en exceso no es un problema muy común, pero sucede en determinados casos y especialmente cuando se padece enfermedades neurológicas como el Parkinson o la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). Lo cierto es que la hipersalivación, además de muy molesta, puede comportar otros problemas como descamación de los labios, dermatitis en el mentón, fatiga muscular e incluso alterar el sentido del gusto, entre otros. Vamos a conocerla un poco más.
Salivar mucho es muy normal en bebés o niños pequeños con el consabido babeo, sobre todo cuando empiezan a erupcionar los primeros dientes. Así, esta salivación es natural hasta los tres años de edad e incluso en algunos casos será recomendable colocarles un babero para recoger este sobreabundancia y evitar que se empape la ropa, pero en adultos sí que entraña un problema que necesita ser evaluado.
¿Qué es la hipersalivación?
En concreto, la hipersalivación o sialorrea consiste –como decíamos– en un superávit de saliva a causa de una enfermedad de tipo neurológico o por alteraciones de la cavidad oral. También las mujeres embarazadas suelen salivar mucho durante el primer trimestre de la gestación.
La sialorrea es una patología bastante habitual.
Además, podemos clasificarla en dos tipos. Las vemos de inmediato:
- La sialorrea anterior: es la responsable del típico babeo ya que la saliva se derrama por las comisuras.
- La sialorrea posterior: la saliva se dirige desde la lengua a la faringe.
Causas que provocan que salives mucho
Aparte de las patologías neurológicas mencionadas con anterioridad y el embarazo, existen numerosos factores que pueden desencadenar la hipersalivación. De esta manera, podemos citar los siguientes:
- Regurgitación de saliva debido a la acidez.
- Uso de ortodoncia.
- Infecciones en los senos nasales, así como en la garganta o periamigdalinas.
- Una deficiente higiene oral.
- Picaduras de arañas venenosas.
- Úlceras bucales.
- Fracturas en la mandíbula.
- Lengua agrandada.
- Etc.
¿Cómo detectar la hipersalivación?
Pero ¿cuándo se podría afirmar que la cantidad de saliva es excesiva? Para determinar la existencia del problema, tenemos que estar atentos a los siguientes síntomas:
- Babeo persistente.
- Necesidad de escupir y tragar de manera constante a fin de regular la cantidad de saliva presente en la boca.
- Fatiga muscular debido a la necesidad de tragar saliva continuamente.
- Labios descamados.
- Dermatitis en el mentón.
- Mal aliento.
- Alteración del habla debido a salivar mucho.
Tengo demasiada saliva en la boca: ¿cómo puedo tratarme?
Si la causa radica en una enfermedad subyacente, convendrá tratarla oportunamente. En cualquier caso, será necesario evaluar criterios como los que siguen:
- Condiciones médicas del paciente.
- Medicamentos que se ingieren.
- Cuándo ocurre la hipersalivación y qué lo desencadena
- La cantidad de saliva producida.
- Si el problema es crónico o puntual.
- Etc.
El tratamiento puede ser dispar dependiendo de la causa y la gravedad del caso. De esta manera, los profesionales médicos pueden decantarse por ciertos tipos de terapias o la administración de medicamentos.
También es posible recurrir a sencillos métodos caseros como, por ejemplo, beber suficiente agua, ya que puede frenar la producción excesiva de saliva, además de cepillarse los dientes y usar un enjuague bucal
No obstante, si es muy acusado y reviste gravedad, puede ser aconsejable practicar una cirugía.
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